Para realzar la exclusividad del vino, la Casa diseña desde 2017 un estuche metálico reutilizable, a juego con los generosos contornos de la botella de Cuvée Rosé.

Laurent-Perrier fue la primera Casa de Champagne, en los años sesenta, en elaborar un champagne rosado de maceración. Esta exigente elección, fruto de un saber hacer excepcional, ha dado origen a Cuvée Rosé, un champagne delicadamente aromático. Intensos aromas de fruta roja emergen de la botella que lleva el escudo de Laurent-Perrier.

Tras los estampados «Maillage», «Constellation», «Zèbre», «Papillons» y el año pasado «Bambou», Laurent-Perrier desvela el estampado «Pétales»: una malla ligera donde los pétalos de Dalhia o Strelitzia se entrelazan en brillantes colores Pop. Una armonía de colores en tonos rojos y rosas con reflejos anaranjados o azulados, que recuerdan a los matices de la paleta de fruta roja y negra, fresca y crujiente, de este gran champagne.